Existen numerosas adicciones de las llamadas sin drogas o sin sustancias:
Juego patológico, adicción al sexo, adicción a las compras, adicción a la comida, adicción al trabajo, adicción al ejercicio físico, adicción al teléfono móvil, adicción a internet.... Todas ellas suponen una afición patológica que, al causar dependencia, restringe la libertad del ser humano.
Tienen en común ser una experiencia buscada con ansia, con pérdida de control del sujeto y que supone una sensación de placer/culpa. En casi todas ellas, menos en el juego patológico, es implanteable la abstinencia, ya que son conductas necesarias de la vida cotidiana. En estos casos el objetivo terapéutico se centra en el aprendizaje del control de la conducta.